Al igual que otras partes del cuerpo, la boca está llena de gérmenes. En su mayoría, esos gérmenes son inofensivos. Sin embargo, la boca es la entrada al tracto digestivo, que es el conducto largo de órganos, que va desde la boca hasta el ano, por el que se pasan los alimentos. La boca también es la entrada a los órganos que permiten la respiración, que son las vías respiratorias. Por ende, a veces, los gérmenes en la boca pueden derivar en una enfermedad en todo el cuerpo.

¿Qué afecciones se pueden relacionar con la salud bucodental?
Tu salud bucal podría desempeñar un rol en afecciones como las siguientes:
- Endocarditis. Es una infección del endocardio, el revestimiento interno de las válvulas o cavidades cardíacas. En la mayoría de los casos, suele ocurrir cuando los gérmenes de otra parte del cuerpo, como la boca, se diseminan por la sangre y se adhieren a determinadas áreas del corazón. La infección del endocardio es poco frecuente. Sin embargo, puede ser mortal.
- Enfermedad cardiovascular. Algunas investigaciones sugieren que la enfermedad cardíaca, las arterias obstruidas y el accidente cerebrovascular podrían estar relacionados con la inflamación y las infecciones que pueden causar los gérmenes bucales.
- Complicaciones durante el embarazo y el parto. La periodontitis, que es la enfermedad de las encías, se ha relacionado con el nacimiento prematuro y el bajo peso al nacer.
- Neumonía. Ciertos gérmenes en la boca pueden pasar a los pulmones, lo que puede causar neumonía y otras enfermedades respiratorias.

¿Cómo puedo proteger mi salud bucal?
Para proteger tu salud bucal, cuida tu boca todos los días.
- Cepíllate los dientes al menos dos veces al día durante dos minutos cada vez. Utiliza un cepillo con cerdas suaves y pasta dental con fluoruro. También cepíllate la lengua.
- Limpia el espacio entre los dientes todos los días con hilo dental, un irrigador dental u otros productos diseñados para eso.
- Sigue una dieta saludable y limita los alimentos y las bebidas con azúcar.
- Reemplaza tu cepillo de dientes cada 3 o 4 meses. Hazlo antes si las cerdas se desgastan o pierden color.
- Acude a un dentista al menos una vez al año para que te haga controles y limpiezas. Tu dentista podría sugerir consultas o limpiezas más seguidas, según tu caso. También podría remitirte a un especialista en encías o periodoncista si tus encías necesitan más cuidados.
- No consumas tabaco.
Comunícate con tu dentista de inmediato si notas cualquier problema de salud bucal. Cuidar tu salud bucal equivale a cuidar tu salud general.